Autor

Raquel Emma Neira Suaña

 

Asesor

Mg. Cristian Yarasca

 

A través de la historia el hombre se estableció entorno a cuerpos de agua, ya sea ríos, lagunas y humedales por los grandes beneficios que estos otorgan, de la misma forma el lago Titicaca albergo a sus primeros habitantes en la época colonial, al huir de la masacre y conquista de los españoles, se desplazaron en las aguas del lago como una táctica defensiva, construyendo balsas (pequeñas embarcaciones de totora) y habitando en ellas dentro de los totorales. Hoy, los Urus al tener una población mayor cuentan con espacios educativos y salud, sin embargo, estos se encuentran en condiciones poco favorables para el clima, pobladores e infraestructura. Entonces las estrategias proyectuales en el espacio lacustre son las siguientes, primero se revaloriza la arquitectura vernácular y el perfil rural, la capacidad flotante se reinterpreta conservando las raíces tradicionales con tecnología moderna, además el equipamiento debe presentar un carácter modular permitiendo piezas pequeñas y no una gran pieza, estas se van armando de acuerdo a la densidad y necesidad poblacional, manteniendo un perfil bajo, y así lograr integrarse a su entorno. De acuerdo a esto se propone un catálogo de módulos en 7 distintos puntos, ubicado el punto 1 en la ciudad de Puno, como punto de partida del módulo navegable hacia las configuraciones flotantes de los Urus Chulluni, Cruz y Qapi ubicado estratégicamente entre los totorales para protegerse del oleaje, friaje y vientos. Los puntos de Amantani, Taquile y Llachón son de llegada del módulo navegable que traslada docentes, médicos, enfermeras y estudiantes. Buscando generar una mejor calidad de vida con sus propios recursos naturales y organización comunitaria.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]